Tiempo después de haber cumplido sus 20 años, tuvo su primer contacto y sus primeras experiencias en el hasta entonces desconocido Mundo Digital, siendo transportada a aquella nueva dimensión contra su voluntad para resolver un conflicto que se estaba presentando. Ahí fue donde conoció a aquel que sería su compañero Digimon: Gabumon; emprendiendo juntos una suerte de "misión" para derrotar a los Jörmungandr y, posteriormente, a Hazard Ephes y su Khaosmon. Durante estos días tuvo la oportunidad de volver a sentir la compañía de jóvenes de su edad, socializando un poco, aunque su reticencia y carácter flemático siempre se mantuvo hacia esos desconocidos con los que se vio forzada a formar equipo para poder sobrevivir. Gracias a esta experiencia, calificada como cruel por ella y el resto de los involucrados, significaría el parteaguas para que algo en Raisa comenzara a cambiar, dándose cuenta de sus capacidades de liderazgo (gracias al resto) y comprendiendo que, contrario a la creencia que por mucho tiempo tuvo, no todas las personas figuraban con malas intenciones. Esa experiencia finalizó cuando lograron derrotar a Hazard, convirtiéndose en una de las pocas sobrevivientes y ganándose -para su disgusto- el título de "Heroina". Al despedirse de Gabumon y haber regresado al mundo real, decidió deslindarse parcialmente de su tío y siguió trabajando en lo suyo, en un vano intento por olvidar lo que había vivido. Se mudó a Moscú y compró una residencia, viviendo en solitario por los siguientes meses.
Fue entonces que el llamado ocurrió y la vida le brindó nuevamente la oportunidad de regresar al Mundo Digital, viéndose transportada por segunda vez a aquella dimensión y reuniéndose nuevamente con Gabumon tras meses de haber estado separados. A pesar de la aversión inicial que sintió por volver a ese lugar, en el fondo supo que eso era justamente lo que ella más deseaba y quería intentarlo, porque quizás su futuro se encontraba en el hogar de su compañero digital y no en el suyo. Junto a Gabumon, Raisa comenzaría sus labores de Tamer, aprendiendo de las responsabilidades y tareas que ahora tenían por delante. Así fue involucrándose en distintos sucesos, que iban desde los más simples hasta situaciones de crisis como la Noche del Ogro y la Disputa Territorial, conociendo y haciendo amigos de paso, y entendiendo facetas de sí misma que ignoraba poseer. Fue durante el extraño viaje en el que se vio involucrada a una dimensión paralela, la "otra" File, donde se dio cuenta de uno de sus más terribles miedos: ver de nuevo a DexDorugamon (o cualquiera de sus formas). Desde ese momento nacería en ella cierta aversión por aquel Digimon, mismo que resultaba ser compañero de su mejor amigo: James Denway. Sin embargo, fueron este y más sucesos los que hicieron que Raisa comenzara a madurar más como Tamer, a ver ese mundo con otros ojos, naciendo en ella el deseo de protegerlo a como de lugar, pues ese era su nuevo hogar. Fue así que se unió a la fundación de Gungnir, aceptando la invitación de su mejor amiga, Mai Hitomi, a unirse a ellos, aunque en un principio dudó en hacerlo por sus problemas al trabajar en equipo.
Otro de los puntos clave para el crecimiento y madurez, tanto de Raisa como de Gabumon, ocurrió tras haber visitado las ruinas en el Bosque Amida en compañía del afamado arqueólogo Rei Nishimura, de quien posteriormente recibiría un D-Scanner. Tiempo después de haber recibido ese Digivice, y durante sus primeros días en Holy Angel Citadel, Raisa recibió un mensaje en el dispositivo que la llamaría hasta el Templo de la Luz (donde se encontró momentáneamente con Esteban), lugar en el cual viviría una serie de pruebas junto a Gabumon, tanto físicas como mentales, las cuales la llevarían hasta encontrar el Spirit Humano de la Luz, herencia de AncientGarurumon, el cual guardaba parte de su poder en la forma del espíritu de la luz, Wolfmon. Raisa tomó posesión del objeto, convirtiéndose en una de las portadoras de Spirit y heredera del poder de un Juttoushi. Días después, se llevaría la sorpresa al enterarse que la mayoría de miembros de su Guild eran portadores de uno, siendo aquella una extraña casualidad la cual todos parecieron notar de inmediato, aceptando su destino como quienes se encargarían de cumplir las expectativas de los Juttoushi y su misión como Gungnir.
Progresivamente, Raisa ha ido creciendo al lado de Gabumon y Wolfmon, superándose día con día y aprendiendo de cada experiencia que viven juntos. Aunque cierta inestabilidad en la Guild ocurrió después de su viaje a la isla sin nombre, en donde el grupo estuvo a casi nada de desintegrarse y en donde, por primera vez, Raisa superó temporalmente su fobia al océano para salvar a Mai de un Dagomon que la había capturado. Durante los días en la isla ocurrieron diversos acontecimientos, desde una discusión con Ewain que terminó en una batalla entre ambos usando a los Spirits (y de la cual salió vencedora), hasta un duro y agresivo intercambio de palabras con Masaki. Estos sucesos crearon un distanciamiento entre sus miembros, el cual solo incrementó con cierta vivencia nocturna que Hanz y Raisa compartieron semanas después de San Valentin, causando más problemas que resoluciones a la Guild. Con James fuera del grupo, eventualmente un nuevo miembro entraría a Gungnir: Samali Winters. Y, como si de un deja vú se tratase, volvieron a surgir conflictos en el grupo, especialmente en Von Kaulitz. Actualmente se encuentra en la búsqueda de su propia "luz", como se lo indicó Wolfmon en algún momento, desea comprenderlo, superar sus propias creencias, hasta convertirse en aquello que el Juttoushi vio en ella y que le resulta imposible de ver. Se ha convertido en alguien que protegerá sin dudarlo, que atesora su nueva vida y que desea cuidar de ese mundo, pese a encontrarse con obstáculos internos que a veces teme vayan a mermar sus decisiones.